«Se nos ha ido una auténtica magia para todos»

Mi querido amigo Fernando, el gran Magic Tissa, ya está con Dios, gozando de su presencia tras una larga lucha hospitalaria infectado por el dichoso COVID… Tenía 66 años. Una mujer extraordinaria, unos hijos maravillosos y unos nietos que valen millones.

Para mí, todo un referente. Un profesional de la magia. Un artista, hijo de artistas, padre de artistas y abuelo de artistas. Llevaba el arte en los genes, y lo ha sabido transmitir.

Pero no sólo eso. A nivel humano, destacaba siempre por su generosidad. Todo lo que tenía lo daba. Regalaba sonrisas a la gente con su magia. Dominaba el escenario como nadie. No actuaba, era él mismo. Extraordinario, como ninguno.

Un hombre creyente. Con una fe que le llevaba a darse a los demás. Compartir sus conocimientos, su tiempo, su ilusión.

Miembro del Círculo Mágico Internacional Don Bosco, Jefe de Estudios de los aprendices online, muy devoto de San Juan Bosco e implicado con la sociedad. Durante años ha formado parte de la Pastoral Penitenciaria y acompañaba a esas personas que desde la cárcel pasaban por un mal momento. Él con su magia alegraba sus días tristes.

Su nieta Natalia me comentaba por teléfono: “Mi abuelo se desvivía por su familia, no solo por estar siempre que hiciera falta, sino que para él era muy importante transmitir sus conocimientos y sus vivencias para enseñarnos como enfrentarnos a la vida y ser tan buenas personas como él”.

Y así es. Yo, en mi adolescencia, tuve la suerte de tenerlo como maestro y amigo. Recuerdo su ilusión al enseñarme juegos de magia. Sus buenos consejos, su generosidad y sus detalles. Desde entonces, hasta ahora, siempre ha estado ahí. Desde la gratuidad ha participado en todas las Galas de Magia Solidaria del Círculo Mágico Internacional Don Bosco (CMIDB) www.lamagiadedonbosco.com, apoyando todos los proyectos.

No tengo la menor duda. Hoy el cielo está de fiesta por que ha ganado a un padre de familia ejemplar, un mago maravilloso, a un hombre de Dios, y a un ser humano excepcional.

Querido Fernando, gracias, gracias y gracias. Te llevaremos siempre en el corazón, y sabemos que desde allá arriba serás como esa estrella de Navidad que nunca deja de brillar. Gracias por mantener viva nuestra ilusión. Descansa en paz.

P. Sergio Codera, Sdb
@sercode / @CMIDB